Un espresso perfecto es una taza de café preparada al momento para ser consumida. Es un sofisticado método de preparación de café cuyas principales características se resumen en la rapidez de la extracción, el aroma, el sabor y la crema resultante en la taza, variables, imposibles de conseguir con ningún otro sistema de elaboración de café. Es una bebida compleja y lo distinguen por su preparación y concentración de notas aromáticas.

El color, la crema, el aroma y el sabor de la taza final de espresso dependerá del tipo de café que se utilice para la preparación. Se aconsejan los blends de variedades de cafés arábica.

La taza no debe superar los 30ml y se produce empujando un chorro de agua caliente a una presión de 9 o más atmósferas a través de una capa de café molido fina y prensada cuidadosamente.

Para los expertos, el espresso  es la quinta  esencia  del  café  y la única manera de degustar su aroma con la máxima intensidad.

Preparación del espresso perfecto 

En la preparación del espresso, la bebida se obtiene al pasar el agua caliente a presión por el grano molido en sólo unos segundos. Como resultado en la superficie de la taza se forma  una  emulsión  de  sustancias  grasas  y  aromáticas  que  conforman  la  crema, elemento propio en contacto con las papilas gustativas nos revela si el café ha sido correctamente elaborado.

La taza de espresso es aproximadamente 97% de agua y un 3% de componentes sólidos solubles. De ahí la importancia de trabajar con un buen café, con una buena máquina y también con una buena agua.

Fuente: Forum Café